A veces pasa. Piensas que harás algo para siempre, pero un día es el último y, en el momento que ocurría, no eras consciente de ello. Un día fue el último que jugué con mis amigos al fútbol en la parcela de mi amigo Carlos. Un día fue el último que me dio clase ese profesor que me encantaba. Un día fue el último que me sentí un niño pequeño. Y sí, un dí…
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